Para la comunidad del Liceo es una triste noticia la muerte de Olguita Cano.
Olguita acompañó niños, niñas y maestras con un espíritu generoso y particularmente sensible. Su andar lento y cauto, amoroso y creativo, permitió a todos los que la conocimos iluminar un espacio de nuestras vidas. La quisimos y ella nos quiso. Quiso al proyecto Juan Ramón y nos deja en el recuerdo su esencia, lo mejor que un ser humano puede entregar.